Vital Aza 20 C/ Elfo, 80

Noticias

Reformas sin sorpresas: cómo evitar sobrecostes

Hacer una reforma puede ser una experiencia emocionante… o un auténtico dolor de cabeza si no se planifica bien. Uno de los problemas más comunes son los sobrecostes inesperados, que desajustan el presupuesto y generan frustración. En este artículo te contamos cómo evitarlos para que tu reforma sea un éxito desde el primer ladrillo.

 1. Pide un presupuesto detallado por partidas

Nada de “reforma baño: 4.000 €”. Un buen presupuesto debe incluir materiales, mano de obra, tiempos estimados, y posibles extras. Revisa partidas como:

  • Demoliciones y desescombro

  • Fontanería y electricidad

  • Alicatados y solados

  • Sanitarios, muebles y grifería

  • Pintura y acabados

Consejo: desconfía de los presupuestos “cerrados” sin desglose. A veces esconden recargos posteriores.

 2. Cierra el proyecto antes de empezar

Cambiar de idea en mitad de una reforma es caro. Si decides cambiar el suelo, mover un tabique o añadir enchufes sobre la marcha, lo pagarás en horas extra, materiales y retrasos.

Solución: trabaja con una empresa que te ayude a definir bien el proyecto desde el principio. Incluso un plano o infografía te ayudará a visualizarlo todo antes de empezar.

3. Elige materiales con antelación

Muchas veces el cliente se decide por un tipo de azulejo o encimera… pero está descatalogado o tarda 3 semanas en llegar. Resultado: cambio de materiales de última hora (más caros) o retrasos en la obra.

Solución: elige los materiales antes de empezar y asegúrate de que están disponibles o tienen alternativas claras.

4. Deja margen en el presupuesto

Un presupuesto realista siempre incluye un 10% de colchón para imprevistos. Aparecen humedades, hay que reforzar un muro, o la instalación eléctrica está peor de lo que parecía.

Tip: no inviertas el 100% de tu presupuesto desde el principio. Reserva una parte para lo inesperado.

5. Firma un contrato con plazos y condiciones claras

Un contrato de obra es fundamental para proteger ambas partes. Debe incluir:

  • Plazos de inicio y finalización

  • Forma de pago

  • Qué está incluido y qué no

  • Penalizaciones por retraso (si las hay)

  • Responsabilidad en caso de daños

Si no hay contrato, estás a merced de los imprevistos.

6. Asegúrate de que trabajan con profesionales

Contratar “a un amigo que lo hace más barato” puede salir caro. Empresas sin seguros ni garantías no se hacen responsables si algo sale mal… y tú acabarás pagando el doble.

Busca una empresa con experiencia, referencias, reseñas verificadas y todo en regla: seguros, autónomos dados de alta, etc.

En resumen…

Evitar sobrecostes en una reforma es cuestión de planificación, claridad y profesionales serios. Invertir tiempo antes de empezar te ahorrará muchos disgustos (y euros) después.

¿Te ha resultado útil este artículo?
Si estás pensando en reformar, pide un presupuesto y te ayudamos a planificarlo con cabeza.

Leave a comment